Llega setiembre y con él la vuelta a la rutina. Para unos, algo esperado; para otros, un agobio. Son muchas las personas que, después de tener unos días de descanso, volver al trabajo y la rutina se les hace cuesta arriba y sufren el conocido “síndrome postvacacional”.
¿En qué consiste el “síndrome postvacacional”?
El “síndrome postvacacional” se trata de un malestar físico y emocional que se sufre durante la incorporación al trabajo después de un período de vacaciones y hace que el rendimiento laborar y la vida familiar y personal del trabajador se vean afectadas.
En España un 45% de los empleados sufren este conocido síndrome y se debe a “una ruptura muy brusca entre el ritmo de las vacaciones y la incorporación al trabajo sin hacer una correcta transición”, dice Ana San Bruno responsable del departamento de psicología de “Mas Vida Red”
Trucos y estrategias para la vuelta a la rutina
Para que esto no nos ocurra y poder volver al trabajo con ganas y motivación existen infinidad de trucos y estrategias. A continuación tenéis las que a nosotros más nos gustan y que creemos más efectivos.
- Mantener la actitud positiva. En vacaciones nos sentimos más positivos y con más ganas de hacer cosas. No perdamos esa actitud al volver al trabajo. Reflexionar sobre nuestro trabajo y centrarse en los aspectos positivos nos ayudará a volver con motivación.
- Dormir las horas que necesites. Las vacaciones son sinónimo de cambio de horarios y dormir menos, pero volver al trabajo significa no poder dormir hasta tarde. Por lo que deberemos irnos a dormir antes para poder descansar las horas que necesitamos.
- No abusar del café, el tabaco u otras substancias estimulantes. Una buena dieta y dormir lo que se necesite son las herramientas necesarias para ayudar a nuestro cuerpo a regularse.
- Si hemos viajado, no apurar el viaje hasta el último día. Dejar un día o dos para organizarnos la vuelta al trabajo hará que no sea tan brusca.
- Ponerse en marcha unos días antes. Pensar en aquellos temas que dejamos pendientes al irnos de vacaciones nos ayudará a situarnos y saber por dónde empezar al volver.
- Planificar el primer día de trabajo. Conociendo los temas que tratar y resolver, organizar aquellas acciones que hemos de hacer (a qué dar prioridad, a quien llamar…) nos ayudará a que sea más fácil.
- Recupera rutinas. Levantarse temprano, desayunar en la oficina, etc. ayudan a regularnos y amoldarnos más rápidamente al trabajo.
- Focalizarnos en la tarea. A la vuelta de las vacaciones es más fácil que nuestro cerebro entre en estado de ensoñación. Cuando nos pase debemos evitarlo y centrarnos en lo que tenemos a nuestro alrededor.
- No olvidar las pausas y descansos. Incluir pequeños descansos después de realizar cada tarea hará que el trabajo sea más ameno y fácil de sobrellevar.
- Escoger una actividad fuera del trabajo que nos motive. Saber que al finalizar la jornada haremos algo que nos guste hará más fácil volvernos a poner en marcha después de las vacaciones. Olvidémonos del ordenador y la tele y pasemos tiempo con nuestra familia, hijos, pareja, amigos, etc.
- Seguir nuestro método productivo. Trabajar según nuestros principios productivos y de gestión de actividades nos ayudará a coger el ritmo más rápido.